En un momento clave para el fútbol español, el periodista Roberto Gómez ha lanzado un llamado contundente: Luis de la Fuente debe contactar ya con Hansi Flick. Su intervención en 'La Tribu' no solo repasó el estado de los clubes en Europa, sino que puso el foco en una cuestión que trasciende lo deportivo: la gestión del talento emergente, especialmente en el caso de Lamine Yamal.
Gómez comenzó su análisis destacando el buen momento de los equipos españoles en competiciones europeas. El Real Madrid lidera su grupo en Champions, mientras que el Atlético de Madrid, según el periodista, es actualmente el equipo más sólido de España y uno de los tres mejores de Europa. También reconoció el buen rendimiento de Barcelona, Villarreal y Athletic, subrayando que todos necesitan resultados positivos para mantener su impulso.
Sin embargo, el punto central de su intervención fue la necesidad de un diálogo directo entre el seleccionador nacional y el técnico del Barça. Gómez no se conforma con gestos simbólicos ni con reuniones mediadas: “Aquí no se trata de limar asperezas, se trata del bien del fútbol, del chaval y de todos”, afirmó con rotundidad. Para él, la situación de Yamal —un jugador de 16 años con un peso creciente en la selección y en el club— requiere una coordinación clara y responsable.
Como ejemplo histórico, el periodista recordó el episodio de 2012, cuando Pep Guardiola llamó a Vicente del Bosque para hablar sobre la carga de jugadores del Barça en la selección. Del Bosque, en un gesto de profesionalismo y respeto, se presentó en las instalaciones del club catalán. “Hubo diálogo, respeto y sentido común”, resaltó Gómez, añadiendo que ese modelo debe ser la referencia actual.
El comentarista también criticó el distanciamiento que hoy existe entre periodistas, técnicos y jugadores. “Antes comíamos y cenábamos con los futbolistas, ahora ni podemos ir a los entrenamientos”, lamentó. Y no se quedó ahí: señaló que muchos jugadores prefieren interactuar con influencers como Ibai Llanos antes que con periodistas especializados, lo que, según él, refleja un cambio profundo en la cultura del fútbol moderno.
Para Gómez, la solución no está en plataformas digitales ni en espectáculos mediáticos. “No hace falta Twitch ni YouTube, basta con coger el teléfono. Más calle, más contacto, más fútbol de verdad”, sentenció. Su mensaje es claro: la comunicación directa, honesta y profesional sigue siendo la herramienta más eficaz para resolver conflictos y proteger el talento.
En un deporte cada vez más mediático y fragmentado, el llamado de Gómez es un recordatorio de que, detrás de los titulares y las redes sociales, sigue existiendo un fútbol que se construye con diálogo, respeto y sentido común. Y en este caso, el futuro de Lamine Yamal —y del fútbol español— depende de que esa llamada se haga ya.