El Joventut Badalona reafirmó su dominio en la Basketball Champions League al vencer con solvencia al Hapoel Holon israelí por 65-81, en un partido disputado a puerta cerrada en Hungría. Este triunfo no solo les permite situarse como líderes en solitario del grupo C, sino que también mantiene su condición de invicto esta temporada, un logro que refleja la solidez y cohesión del equipo bajo la dirección de Dani Miret.
El encuentro se decidió en el último cuarto, gracias a una actuación coral en la que destacaron Henri Drell y Ricky Rubio, ambos con 14 puntos. El alero estonio y el base español fueron claves en los momentos decisivos, especialmente en la recta final, donde Drell selló el partido con dos jugadas consecutivas bajo el aro que pusieron el marcador en 59-73 a falta de tres minutos.
Desde el inicio, los verdinegros impusieron un ritmo físico y agresivo, aprovechando la movilidad de jugadores como Yannick Kraag, quien abrió el marcador con impacto (9-13 en el minuto 5). Rubio, por su parte, mostró su experiencia con dos triples consecutivos que ampliaron la ventaja (16-23 en el minuto 8). La primera mitad terminó con un cómodo 33-40 a favor de la Penya, gracias también a la aportación de Adam Hanga, que jugó en suelo húngaro por motivos geopolíticos.
En la segunda parte, el Joventut mantuvo la presión. Ante Tomic aportó solidez en la pintura, mientras que el joven Miguel Allen demostró su potencial con rebotes y contraataques que ampliaron la ventaja (25-34 en el minuto 17). Aunque el Hapoel Holon intentó reaccionar en el tercer cuarto, los catalanes respondieron con eficacia, especialmente con un 2+1 de Rubio que puso el 50-59.
El último periodo fue una demostración de madurez. Un triple de Drell (55-68) y sus siguientes acciones bajo el aro dejaron el partido prácticamente sentenciado. La victoria final (65-81) refuerza la confianza del equipo y su aspiración de liderar la fase de grupos con autoridad.
Con este resultado, el Joventut Badalona no solo sigue invicto, sino que también envía un mensaje claro a sus rivales: su combinación de talento joven, experiencia y juego colectivo los convierte en uno de los equipos a batir en la competición.