El Unicaja afronta el último compromiso del año 2025 con la obligación de sumar una victoria que le mantenga con opciones reales de clasificación para la Copa del Rey. El conjunto malagueño recibirá este martes 30 de diciembre al Joventut Badalona en el Martín Carpena en un duelo directo por la zona alta de la clasificación de la Liga ACB.
La situación de ambos equipos no podría ser más diferente. Mientras que el cuadro visitante llega en un buen momento de forma tras imponerse al Breogán en la jornada anterior, los de Juan Antonio Orenga atraviesan por un bache preocupante con dos derrotas consecutivas en competición doméstica. Las caídas ante el Real Madrid y el Baskonia han dejado al Unicaja en la séptima posición de la tabla, justo por detrás de su rival de este martes, que ocupa el sexto lugar.
La importancia del encuentro trasciende los simples puntos en juego. Con la mitad de la temporada ya disputada, cada victoria se convierte en oro para asegurar un billete a la Copa del Rey, competición que se disputará en febrero y a la que solo acceden los ocho primeros clasificados al término de la primera vuelta. Un triunfo permitiría al Unicaja recortar distancias con el Joventut y asentarse en puestos de privilegio, mientras que una derrota complicaría sensiblemente sus aspiraciones.
El horario del partido está fijado para las 19:00 horas en el pabellón malagueño. Los aficionados que no puedan acudir al estadio tendrán múltiples opciones para seguir el encuentro, ya que el duelo se emitirá en directo a través de las plataformas DAZN y Movistar, que poseen los derechos de retransmisión de la competición.
La expectación en torno al choque es máxima, como demuestra el hecho de que las entradas se agotaran hace varios días. El Martín Carpena registrará una gran entrada, con la afición local esperando poder animar a su equipo en un momento crítico de la temporada. La directiva del club ha hecho un llamamiento a los seguidores para que creen un ambiente intimidatorio que ayude al equipo a superar esta mala racha.
La Liga ACB ha hecho pública la designación arbitral para este compromiso. El trío arbitral estará compuesto por Antonio Conde, Alberto Sánchez Sixto e Igor Esteve, tres colegiados con amplia experiencia en la competición y que estarán bajo la lupa de ambos conjuntos dada la trascendencia del encuentro.
Además del Unicaja-Joventut, la jornada incluye otros partidos igualmente atractivos. El Río Breogán recibirá al Baskonia el lunes 29 a las 20:00 horas, mientras que el martes habrá triple jornada con el Burgos-Gran Canaria a las 18:00, el Tenerife-Granada a las 19:00 (en horario insular) y el Murcia-Real Madrid a las 21:00, este último con el conjunto blanco como gran favorito.
El viernes 2 de enero se cerrará la jornada con cuatro encuentros más: Bilbao-Valencia a las 18:00, Andorra-Lleida a las 19:00, el Barça-Zaragoza a las 20:00 y el Manresa-Girona a las 21:00, completando así una fecha muy completa de la máxima competición del baloncesto español.
El Unicaja necesitará recuperar su mejor versión, especialmente en defensa y en el control del rebote, dos aspectos que le han fallado en las últimas salidas. La aportación de jugadores como Dylan Osetkowski y Kameron McGusty será fundamental para romper la dinámica negativa, mientras que el Joventut confiará en su juego coral y la dirección de Pau Ribas para mantener su buena racha.
El técnico malagueño tendrá que hacer malabares con la plantilla, ya que algunos jugadores llegan con molestias físicas tras el intenso calendario de las últimas semanas. La rotación será clave para mantener el ritmo durante los 40 minutos ante un rival que gusta de correr la cancha y anotar con facilidad en transición.
La presión recae sobre los hombros del Unicaja, obligado a ganar para no despegarse de la zona cómoda de la clasificación. La derrota supondría un golpe anímico importante de cara a 2026, mientras que la victoria serviría como revulsivo para afrontar la segunda vuelta con optimismo renovado.
El baloncesto malagueño espera que su equipo dé la talla en un momento decisivo de la temporada. La afición, pese a las dos últimas derrotas, mantiene la fe en un plantel que ha demostrado su calidad en Europa, donde lidera su grupo en la EuroCup, pero que necesita encontrar la regularidad en la competición doméstica.
El duelo ante el Joventut se presenta como el test perfecto para demostrar que el Unicaja puede competir con los mejores y asentarse entre los ocho primeros. La temporada es larga, pero los partidos directos como este marcan la diferencia entre los equipos que lucharán por títulos y los que se conformarán con una simple participación.