La historia del baloncesto español tiene momentos que aún hoy provocan un nudo en la garganta. Entre ellos, el Eurobasket 2007 en Madrid, donde la generación dorada —con Pau Gasol, Juan Carlos Navarro, Marc Gasol y Jorge Garbajosa— estaba a un paso de conquistar el primer título europeo de la historia de la selección. Todo parecía escrito: el escenario, el público, el talento. Pero el destino tenía otra historia en mente.
Con el marcador empatado a 59 y apenas 2,1 segundos en el reloj, J.R. Holden, base del CSKA Moscú, lanzó un tiro de media distancia que rozó el aro y cayó en la red. Un momento que se grabó en la memoria colectiva del baloncesto ruso y que dejó a España con el corazón roto. El último intento de Pau Gasol, con un tiro que parecía entrar, fue rechazado por el aro en una escena que simbolizó el giro dramático de la final.
Años después, el recuerdo sigue vivo. Egor Demin, el joven base ruso de los Brooklyn Nets —formado en la cantera del Real Madrid—, aunque no vio el partido en directo (tenía solo un año y medio en 2007), lo conoce bien. "Holden, ¿no?", respondió con una sonrisa al ser preguntado por el momento. "Ese partido es enorme para la historia del baloncesto ruso. Vi el tiro de Holden, creo que contra Pau. Es un momento que todos recordamos con orgullo".
Demin, elegido en el octavo puesto del draft de la NBA, es el primer jugador ruso en la liga desde hace años. Su presencia en la NBA revive el legado de aquel equipo ruso que, además de Holden, contaba con figuras como Andréi Kirilenko —MVP del torneo y jugador de Jazz, Timberwolves y Nets—, Victor Khryapa y Sergei Monia, todos con experiencia en la NBA.
Para España, la derrota fue un golpe emocional. La selección había llegado a la final con una racha impecable, y el Palacio de Deportes de Madrid estaba listo para celebrar. Pero Rusia, con una defensa férrea y un ataque impredecible, logró romper el sueño. El partido no solo fue una victoria deportiva, sino un símbolo de cómo el baloncesto puede cambiar en un instante.
Hoy, con Demin en la NBA y Vladislav Goldin —otro ruso con contrato dual en los Miami Heat—, Rusia vuelve a tener presencia en la liga estadounidense. Y aunque el tiempo ha pasado, el recuerdo de aquel 2007 sigue vivo. Para los españoles, es una herida que nunca se cerró del todo. Para los rusos, un momento de gloria que sigue inspirando a nuevas generaciones.
La historia del baloncesto está llena de giros inesperados, pero pocos han sido tan dramáticos como aquel tiro de Holden. Un instante que cambió el curso de dos selecciones y que sigue siendo recordado como uno de los momentos más intensos de la historia del deporte europeo.