La Copa NBA regresa esta madrugada con una tercera edición cargada de expectación, partidos estelares y un formato que ha sabido captar la esencia del baloncesto competitivo. Desde su estreno en 2023, este torneo de media temporada ha logrado romper la monotonía de la fase regular, ofreciendo a los aficionados una dosis extra de adrenalina con partidos a eliminación directa y una estructura que mezcla lo mejor de las competiciones europeas y americanas.
El campeón defensor es el Milwaukee Bucks, pero la mirada está puesta en los Los Angeles Lakers, que en 2023 levantaron el trofeo con LeBron James como figura central. Ahora, con la incorporación de Luka Doncic, el equipo busca repetir título y darle al esloveno su primer trofeo en la NBA tras su paso por el Real Madrid. La dupla James-Doncic promete ser uno de los grandes atractivos de esta edición, especialmente en partidos como el que enfrentará a los Lakers contra los Grizzlies en la fase inicial.
La NBA no ha creado este torneo de la nada. Su inspiración viene de fuentes tan diversas como la Copa del Rey de la ACB, cuyo formato de Final Four en sede neutral —en este caso, Las Vegas— ha sido adoptado con éxito. Además, la liga ha incorporado elementos de las competiciones de fútbol europeo, como la fase de grupos, para darle más profundidad y estrategia al torneo. El resultado es un híbrido innovador: 30 equipos participan, todos juegan una vez contra cada rival en su grupo, y los seis primeros de cada grupo más los dos mejores segundos avanzan a cuartos de final.
La fase de grupos se desarrollará durante noviembre, con los cuartos programados para el 9 y 10 de diciembre. Las semifinales y la final —la única que no cuenta para la clasificación de la temporada regular— se disputarán en Las Vegas los días 13 y 16 de diciembre, respectivamente. Este diseño permite a la NBA mantener el calendario de 82 partidos por equipo sin sobrecargarlo, integrando la Copa como parte del calendario oficial.
En cuanto a los grupos, la Conferencia Este presenta duelos interesantes: los Celtics y Sixers en el Grupo B, o los Bucks y Knicks en el C. En el Oeste, el Grupo B reúne a Lakers, Mavericks, Clippers y Grizzlies, lo que promete partidos de alto voltaje. El Grupo A, con Suns, Kings y Thunder, también será clave para definir quiénes avanzan.
Más allá de los resultados, la Copa NBA representa un cambio cultural en la liga: una apuesta por la emoción inmediata, el riesgo y la imprevisibilidad que tanto gusta al público global. En un deporte donde las series al mejor de siete dominan los playoffs, este torneo ofrece un contraste refrescante: un solo partido puede definir el destino de un equipo. Para los aficionados españoles, es una oportunidad de ver a sus ídolos en acción con un formato que les resulta familiar y emocionante.
Con LeBron buscando su segundo título en este torneo y Doncic con la mira puesta en su primer trofeo en la NBA, la Copa 2024 promete ser inolvidable. No solo por los partidos, sino por lo que representa: una liga que evoluciona, se adapta y se reinventa para mantener viva la pasión del baloncesto.