La NBA vivió una jornada intensa con hasta 14 partidos disputados que involucraron a 28 de los 30 equipos de la competición. Una noche cargada de emociones que precede a una de las fechas más especiales del calendario: el Día de Navidad, donde la liga norteamericana suele programar sus encuentros más atractivos. Entre todos los resultados, una figura española volvió a ser protagonista absoluto: Santi Aldama alcanzó los 37 puntos por segunda ocasión en los últimos tres partidos, consolidando su momento de forma excepcional.
El jugador de los Memphis Grizzlies demostró una vez más su capacidad anotadora y su importancia dentro del sistema de su equipo. Esta explosión ofensiva no solo habla de su talento individual, sino también de la confianza que el cuerpo técnico deposita en él para liderar el ataque en momentos clave. Los 37 puntos se suman a su cuenta particular en una temporada donde está demostrando un salto cualitativo en su rendimiento. Su evolución es especialmente relevante si consideramos que no siempre ha contado con los minutos necesarios para desarrollar todo su potencial, pero ahora está aprovechando cada oportunidad para demostrar que puede ser una pieza fundamental en la rotación de un equipo aspirante.
Por su parte, los Los Angeles Clippers asomaron la cabeza en la tabla con su segunda victoria consecutiva, un triunfo que suma a la importante conquista lograda anteriormente ante los Lakers en el derby angelino. El equipo de Tyronn Lue muestra signos de consolidación y mejora progresiva, alejándose de posiciones incómodas y mirando hacia arriba en la clasificación de la Conferencia Oeste. La lesión de Kawhi Leonard había generado dudas sobre el futuro inmediato del equipo, pero el rendimiento de Paul George y la profundidad de su banquillo están demostrando que pueden mantener el nivel competitivo. Esta segunda victoria consecutiva refuerza la moral del grupo en un momento crucial de la temporada.
En el Este, los Detroit Pistons continúan su imparable marcha, sumando triunfo tras triunfo y comandando la tabla con puño de hierro. Su regularidad está siendo la clave de un rendimiento excepcional que les ha convertido en uno de los equipos más sólidos de toda la liga. La conexión entre sus jugadores estrella y el trabajo colectivo están dando sus frutos de manera evidente. Cade Cunningham está demostrando por qué fue la primera elección del draft, mientras que el apoyo de jugadores como Jaden Ivey y Jalen Duren completa un núcleo joven pero tremendamente competitivo. Su defensa, en particular, ha sido uno de los pilares de su éxito, limitando a sus rivales a porcentajes muy bajos de anotación.
Los Brooklyn Nets, entrenados por el español Jordi Fernández, también celebraron una victoria importante que les permite respirar ligeramente en la tabla. El equipo neoyorquino ha mostrado una mejoría notable durante el mes de diciembre, donde ha conseguido seis victorias en nueve partidos disputados. Esta racha positiva contrasta con el inicio irregular de la temporada y dibuja un panorama más optimista para los próximos compromisos. La implementación del sistema de Fernández está empezando a dar resultados, especialmente en el lado defensivo del campo, donde el equipo ha mostrado una disciplina que antes le faltaba.
El duelo entre Hornets y Wizards resultó ser un enfrentamiento directo entre dos equipos que ocupan las últimas posiciones de sus respectivas conferencias. Sin embargo, los Charlotte Hornets demostraron un extraordinario esfuerzo colectivo, con hasta ocho jugadores superando la decena de puntos, para hacerse con la victoria ante unos Washington Wizards que parecen a la deriva en estos momentos. LaMelo Ball lideró a los suyos con 23 puntos y 9 asistencias, mostrando su calidad como base organizador y anotador. En el bando visitante, los 16 puntos de Khris Middleton no fueron suficientes para evitar la derrota. La dispersión del talento en los Wizards y la falta de una identidad clara están siendo sus principales problemas durante toda la temporada.
El partido entre Nets y Sixers también dejó titulares interesantes. Los de Brooklyn se impusieron con claridad en Philadelphia gracias a una gran actuación de Michael Porter Jr., que anotó 28 puntos con un 45% de acierto en el tiro (9 de 20). La presencia de Nic Claxton resultó fundamental con un doble-doble de 16 puntos y 10 rebotes, mientras que el joven Egor Demin aportó 20 puntos de calidad. La versatilidad ofensiva de los Nets fue clave, con múltiples opciones que mantuvieron en jaque a la defensa de los Sixers durante todo el encuentro.
El entrenador Jordi Fernández pudo disfrutar de una victoria que refuerza su proyecto. El equipo mostró una defensa sólida, cediendo solo 106 puntos, lo que confirma la tendencia defensiva que han mostrado durante diciembre. En este mes, los Nets solo han permitido más de 110 puntos en dos ocasiones, convirtiéndose en uno de los equipos más difíciles de superar en esa faceta del juego. La comunicación en la pista ha mejorado notablemente, y los jugadores muestran una comprensión mucho más clara de las rotaciones defensivas que Fernández ha implementado.
Por su parte, los Philadelphia 76ers tuvieron una noche complicada. La enfermedad se llevó por delante a varios jugadores importantes, incluido el novato VJ Edgecombe, que está teniendo un impacto notable con 16 puntos de promedio por noche. Pero el mayor problema fue el bajo rendimiento de Tyrese Maxey, su estrella en el backcourt, que promedia 31,7 puntos por encuentro pero que vivió una noche para olvidar con solo 3 aciertos en 14 intentos para un total de 13 puntos. Joel Embiid intentó llevar el peso del equipo con 27 puntos y 6 rebotes, mientras que el veterano Paul George aportó 19 puntos, pero no fue suficiente. La falta de ritmo de Maxey y las bajas por enfermedad condicionaron gravemente las opciones de un equipo que necesita todos sus recursos para competir contra equipos en forma como los Nets.
El partido estuvo igualado en la primera mitad (57-63), pero un 3+1 de Demin a pase de Claxton puso el +12 poco después del ecuador del tercer cuarto (65-76). Tres triples consecutivos para cerrar el cuarto elevaron la distancia a 17 puntos, aunque un triple de Eric Gordon la redujo a 12 en el último segundo del periodo. Un parcial de 10-0 de los locales (90-99) puso temporalmente en peligro la victoria visitante, pero los Nets supieron mantener la calma y cerrar el encuentro con acierto desde la línea de tiros libres y buenas decisiones en los últimos minutos.
Además de estos resultados, también celebraron victorias los Chicago Bulls, Cleveland Cavaliers, Milwaukee Bucks, Toronto Raptors, Minnesota Timberwolves y Orlando Magic. Cada uno de estos equipos suma importantes victorias que les permiten mejorar sus posiciones en la tabla o consolidar sus lugares en la parte alta.
Los Bulls continúan mostrando una competitividad que les mantiene en la pelea por los puestos de playoff, con Zach LaVine y Nikola Vučević liderando el ataque y un banquillo que está respondiendo cuando se le necesita. Mientras tanto, los Cavaliers y Bucks, dos de los favoritos del Este, no dan opción a la sorpresa en sus respectivos compromisos. La pareja de Donovan Mitchell y Evan Mobley en Cleveland, y el dúo de Giannis Antetokounmpo y Damian Lillard en Milwaukee, son garantía de éxito cada noche que saltan a la pista.
Los Raptors, a pesar de una temporada irregular, demuestran que pueden competir con cualquier rival cuando encuentran su ritmo. La juventud de su plantilla, liderada por Scottie Barnes, es compensada con la experiencia de jugadores como Jakob Poeltl, creando un equilibrio interesante que puede ser peligroso en los playoffs.
En el Oeste, los Timberwolves de Anthony Edwards siguen demostrando por qué son uno de los equipos más peligrosos de la conferencia, con un balance ofensivo-defensivo que los hace candidatos a todo. La defensa liderada por Rudy Gobert continúa siendo uno de los muros más difíciles de superar, mientras que Edwards se consolida como una de las estrellas más espectaculares de la generación joven. Por su parte, los Magic de Paolo Banchero continúan su progresión como uno de los proyectos jóvenes más interesantes de toda la liga. El segundo año de Banchero como profesional está siendo espectacular, y el crecimiento de Franz Wagner como segundo espada hace de Orlando un equipo a seguir de cerca en los próximos años.
La jornada dejó claro que la competición está más viva que nunca. Con la Navidad a la vuelta de la esquina, los equipos están afinando sus mecanismos de cara a una de las etapas más decisivas de la temporada. La regularidad de los Pistons, el resurgir de los Clippers, la explosión de Santi Aldama y la mejoría de los Nets son algunas de las historias que marcan esta semana. La liga muestra una paridad sin precedentes, donde cualquier equipo puede ganar en cualquier noche, lo que hace aún más emocionante el día a día de la competición.
El español Santi Aldama, en particular, se está convirtiendo en uno de los jugadores más seguidos por los aficionados europeos. Su capacidad para anotar con tanta facilidad y su importancia creciente dentro de los Grizzlies hablan de un futuro prometedor. Repetir 37 puntos en tan poco tiempo no es casualidad, sino el reflejo de un trabajo constante y una madurez en el juego que sorprende gratamente. Su versatilidad para jugar tanto en el perímetro como en la pintura lo convierte en un match-up difícil para cualquier defensa, y su inteligencia para leer el juego le permite encontrar espacios donde otros no los ven.
La NBA no descansa y, tras esta maratoniana jornada, llega una de las pocas noches sin competición antes de la fiesta del baloncesto navideño. Será entonces cuando los mejores equipos y las mayores estrellas se den cita en unos partidos que se han convertido en tradición para millones de aficionados alrededor del mundo. Los partidos de Navidad son uno de los eventos más especiales del año, donde la liga programa los enfrentamientos más atractivos y donde las estrellas suelen brillar con mayor intensidad. Será el momento perfecto para ver si Santi Aldama puede mantener su racha, si los Pistons continúan su dominio y si los Clippers confirman su resurgimiento ante un rival de entidad.