Tras una temporada marcada por la incertidumbre y las bajas de estrellas, Devin Booker ha encontrado en Jalen Green la chispa que necesitaba para reavivar las esperanzas de los Phoenix Suns. La salida de Kevin Durant y Bradley Beal dejó al equipo en un momento de transición, pero el debut de Green ante los Clippers —con 29 puntos y 6 triples— ha sido una señal clara: el futuro de los Suns empieza ahora.
Green, exjugador de los Houston Rockets, llegó a Phoenix como parte del paquete de intercambio por Durant. Su estreno no pudo ser más espectacular: 29 puntos, 6 triples en 13 intentos y una química inmediata con Booker, quien aportó 24 puntos. Este desempeño no solo rompió récords —es el debutante con más puntos desde Charles Barkley en 1992—, sino que también simboliza un nuevo comienzo para una franquicia que busca reencontrarse con el éxito.
"Estaba demasiado emocionado para dormir. He trabajado duro y estoy feliz de volver a la cancha", dijo Green tras el partido. Su entusiasmo es contagioso, y su energía en la pista es exactamente lo que los Suns necesitan tras años de frustraciones. Su llegada no es solo un refuerzo técnico, sino también un impulso moral para un equipo que ha visto cómo sus grandes apuestas no dieron los frutos esperados.
La historia de Green en Houston fue marcada por altibajos. Drafteado en segunda posición en 2021, no logró consolidarse como la estrella que los Rockets esperaban, especialmente tras un desempeño decepcionante en playoffs frente a los Warriors. Pero en Phoenix, con un rol más definido y junto a Booker, parece haber encontrado su lugar.
El traspaso de Durant fue una decisión estratégica para los Suns. Con un salario elevado y una plantilla desequilibrada, la dirección del equipo —liderada por Mat Ishbia— optó por reinventarse. Además de Green, llegaron picks de draft y otros jugadores clave, como Khaman Maluach y Dillon Brooks. La idea es construir un equipo más joven, versátil y con mayor potencial a largo plazo.
Por otro lado, la salida de Beal —que rescindió su contrato para unirse a los Clippers— y la breve aparición de Chris Paul en el partido contra los Suns, añaden un toque de nostalgia y drama a esta nueva etapa. Paul, compañero de Booker en las Finales de 2021, apenas jugó 10 minutos y anotó solo 2 puntos, recordando a los aficionados los tiempos dorados que ahora parecen lejanos.
Con Green en el equipo, los Suns tienen una nueva oportunidad de brillar. Su velocidad, su tiro exterior y su capacidad para generar juego hacen de él un complemento ideal para Booker. Juntos, forman una dupla joven, dinámica y con mucho potencial. La temporada aún está en sus primeras semanas, pero el debut de Green ha encendido las esperanzas de los aficionados.
En resumen, la era post-Durant y post-Beal en Phoenix no es un final, sino un nuevo comienzo. Con Booker como líder y Green como su nueva media naranja, los Suns tienen la oportunidad de reconstruirse y volver a competir por el título. El futuro es incierto, pero por primera vez en mucho tiempo, parece prometedor.