La noche de la NBA dejó actuaciones memorables, con Giannis Antetokounmpo como protagonista indiscutible. El alero griego de los Milwaukee Bucks desató su poderío ante los Chicago Bulls, firmando una estadística de ensueño: 41 puntos, 15 rebotes y 9 asistencias, además de 2 robos y 2 tapones. Su desempeño fue clave para el triunfo de los Bucks por 126-111, consolidando su buen momento con un récord de 6 victorias y 3 derrotas.
Los Bulls, que llegaban con un sólido 6-1, no pudieron contener la avalancha de Antetokounmpo. Su dominio en la pintura y su capacidad para generar juego colectivo dejaron a los visitantes sin respuestas. Milwaukee demostró por qué sigue siendo uno de los equipos más temidos de la Conferencia Este.
En Memphis, el español Santi Aldama volvió a destacar desde el banquillo. Con 16 puntos —incluyendo 3 triples—, 2 rebotes y 2 asistencias en 28 minutos, el canario aportó profundidad y eficacia al ataque de los Grizzlies. Su equipo se impuso con autoridad a los Dallas Mavericks por 118-104, con Ja Morant liderando el juego con 21 puntos y 13 asistencias. Por su parte, Cooper Flagg, el número uno del draft, apenas logró 12 puntos y 6 rebotes, evidenciando que aún le queda camino por recorrer.
En Texas, el francés Victor Wembanyama volvió a demostrar por qué es considerado el futuro de la liga. Con 22 puntos, 8 rebotes, 4 asistencias y 2 robos, el joven pivot de los Spurs lideró la victoria por 121-110 ante los Houston Rockets. Su actuación fue especialmente brillante en la segunda mitad, donde anotó 18 de sus 22 puntos. La defensa de San Antonio también limitó a Kevin Durant, quien, pese a sus 24 puntos, cometió 8 pérdidas. Alperen Sengun, por su parte, estuvo a punto de lograr un triple-doble con 25 puntos, 9 rebotes y 8 asistencias.
No todo fue alegría para los españoles. Hugo González, con los Boston Celtics, apenas jugó 8 minutos y medio en la derrota ante los Orlando Magic (123-110). Sin tiros intentados, el joven alero aportó 4 rebotes y 1 asistencia. Los Celtics, sin Jayson Tatum por lesión, siguen buscando su mejor versión, aunque Jaylen Brown (32 puntos) y Payton Pritchard (27 puntos) intentaron mantener el equipo a flote.
También cayeron los Brooklyn Nets, dirigidos por el técnico español Jordi Fernández, en un partido que reflejó las dificultades del equipo para encontrar consistencia.
En otro partido destacado, los Cleveland Cavaliers, con el técnico Kenny Atkinson —con ciudadanía española—, arrollaron a los Washington Wizards con un contundente 148-114. Donovan Mitchell lideró el ataque con una actuación imparable, mientras que Darius Garland, en su segundo partido tras su regreso, aportó equilibrio y ritmo al juego.
La jornada también tuvo su dosis de espectáculo en Minnesota, donde los Timberwolves, con 37 puntos de Anthony Edwards, vencieron a los Utah Jazz por 137-118. La ofensiva de los Wolves fue implacable, demostrando que están entre los candidatos más serios a pelear por el título.
En resumen, una noche llena de estrellas, con actuaciones individuales de alto nivel y partidos que dejaron claro que la NBA sigue siendo la liga más emocionante del mundo. Desde el dominio de Antetokounmpo hasta el ascenso de Wembanyama, pasando por el trabajo silencioso de Aldama, la jornada fue un claro reflejo de la diversidad y el talento que caracterizan a la liga.