La NBA Cup 2024 dejó un campeón inédito y una historia conmovedora que trascendió el propio resultado deportivo. Los New York Knicks se proclamaron vencedores del torneo al imponerse por 124-113 a los San Antonio Spurs en una final disputada en Las Vegas, pero el momento más impactante llegó tras el pitido final, cuando Victor Wembanyama rompió en llanto ante los medios de comunicación.
El encuentro, que significó el primer título de la NBA Cup para la franquicia neoyorquina, estuvo marcado por el drama personal que vivió la estrella francesa de 21 años. Minutos antes de iniciar la rueda de prensa, Wembanyama, visiblemente afectado, confesó: "Lo siento. He perdido a alguien esta noche". Las palabras, entrecortadas por la emoción, revelaron una tragedia familiar que había ocurrido apenas horas antes en territorio francés.
Fuentes cercanas al jugador confirmaron posteriormente que su abuela había fallecido en Francia esa misma jornada. Pese a la devastadora noticia, Wembanyama tomó la decisión de saltar a la cancha y disputar el partido más importante de la temporada para su equipo, demostrando un compromiso profesional excepcional en circunstancias extremadamente difíciles.
El desarrollo del choque mostró a unos Spurs competitivos que, durante largos tramos, plantaron cara a los favoritos Knicks. El conjunto texano llegó a disfrutar de una ventaja máxima de 11 puntos a falta de poco más de dos minutos para el cierre del tercer cuarto, gracias a un juego fluido y una defensa activa que desconcertó a los neoyorquinos. Sin embargo, la experiencia y la fortaleza física de los Knicks en el último periodo resultaron decisivas.
El último cuarto fue un monólogo absoluto de los Knicks, que firmaron un parcial demoledor de 35-19 y dominaron el rebote por un contundente 23-6 en ese tramo decisivo. Esta superioridad en la pintura y la capacidad de anotar en momentos clave permitieron a los de Nueva York dar la vuelta al marcador y asegurar el triunfo con autoridad.
Wembanyama, que regresaba a las canchas tras una ausencia de 12 partidos por una distensión en la pantorrilla, completó un notable duelo pese a las circunstancias. Desde el banquillo, el francés aportó 18 puntos y 16 rebotes, consolidando su condición de pieza fundamental en el esquema de Gregg Popovich. Su presencia en la pintura y su versatilidad defensiva mantuvieron con vida a los Spurs hasta los instantes finales.
Tras el partido, el propio Wembanyama reflexionó sobre la experiencia, mostrando una madurez sorprendente para su edad: "Supongo que es la mejor práctica posible para partidos importantes, porque nuestro foco ya está en los playoffs, que es el momento más grande del año. Es bueno haber vivido esta experiencia". Sus palabras, aunque entrecortadas por el dolor, transmitían un mensaje de aprendizaje y mirada al futuro.
Por parte de los Knicks, el base Jalen Brunson fue elegido MVP del torneo tras liderar a su equipo con 25 puntos y 8 asistencias en 41 minutos de juego. El alero OG Anunoby se convirtió en el máximo anotador del partido con 28 unidades, mientras que Karl-Anthony Towns aportó un doble-doble de 16 puntos y 11 rebotes. La profundidad de banquillo neoyorquina, con contribuciones de Jordan Clarkson (15 puntos) y Tyler Kolek (14), resultó clave para sostener el ritmo en los momentos decisivos.
El camino de los Knicks hacia el título fue impecable. En cuartos de final superaron a los Toronto Raptors por 117-101, mientras que en las semifinales deshicieron del sorprendente Orlando Magic con un contundente 132-120. Este triunfo les convierte en el tercer campeón de la NBA Cup, torneo que se disputa desde 2023, tras los Milwaukee Bucks y Los Ángeles Lakers.
El significado histórico del título es considerable para una franquicia que no levantaba un trofeo desde 1973, cuando conquistaron el campeonato de la NBA. La sequía de 52 años sin títulos quedó atrás gracias a una plantilla equilibrada, con estrellas consolidadas y un entrenador, Tom Thibodeau, que ha sabido instalar una cultura defensiva y una mentalidad ganadora.
Por su parte, los Spurs, que no disputaban una final desde aquel último campeonato de 2014 con Tim Duncan, Tony Parker y Manu Ginóbili, mostraron signos evidentes de progresión. La presencia de Wembanyama ha acelerado el proceso de reconstrucción de la franquicia, y esta experiencia en una final de torneo, aunque con sabor amargo, servirá como acelerador de madurez para un equipo joven con aspiraciones de contender en un futuro próximo.
La figura de Wembanyama continúa creciendo no solo por su talento indiscutible, sino por su capacidad de liderazgo y entrega. Jugar una final bajo el peso de una pérdida familiar tan reciente habla de una fortaleza mental excepcional. El baloncesto europeo, y especialmente el francés, vuelve a tener un embajador de primer nivel en la liga más exigente del mundo.
El torneo de la NBA Cup, con su formato de eliminación directa y su premio económico para los jugadores, ha logrado generar interés y competitividad extra durante la temporada regular. Esta edición, sin embargo, quedará recordada tanto por el triunfo de los Knicks como por el gesto de humanidad y profesionalismo de un joven que decidió honrar a su abuela desde la cancha, donde mejor sabe expresarse.