El Consistorio de Baena ha ofrecido esta mañana una explicación detallada a los residentes y comerciantes de la zona sobre el estado actual de los trabajos de renovación que se están llevando a cabo en la calle Catedrático Alcalá Santaella. La comparecencia, que ha tenido lugar en el propio lugar de la actuación, ha contado con la presencia de la primera edil, María Jesús Serrano, el técnico responsable del proyecto, Javier Cortés, y el representante de la constructora encargada de la ejecución, Antonio Morales.
La alcaldesa ha iniciado su intervención pidiendo comprensión a los afectados por los retrasos acumulados en el cronograma previsto, matizando que no se ha producido una interrupción total ni un abandono de las labores. Los motivos que han provocado esta demora obedecen a una serie de circunstancias que no fueron detectables durante la fase de diseño inicial del proyecto.
Problemas estructurales inesperados
Una vez retirado el pavimento existente, los operarios han descubierto graves deficiencias en las infraestructuras de abastecimiento y evacuación de aguas. Las inspecciones han revelado tuberías rotas, conexiones domiciliarias en cotas incorrectas y numerosas filtraciones que comprometen el correcto funcionamiento del sistema. Estas anomalías, invisibles en la fase de estudio previo, han obligado a ampliar el alcance de la intervención más allá de lo inicialmente contemplado en el pliego de condiciones.
El arquitecto director de la obra, Javier Cortés, ha profundizado en las incidencias técnicas encontradas, destacando el estado generalizado de deterioro de las redes subterráneas. La necesidad de reconstruir numerosas acometidas particulares que no figuraban en la documentación original, unidas a la complejidad del punto de unión con otras vías adyacentes que se encuentran a diferente nivel, ha complicado significativamente los trabajos. El técnico ha enfatizado que la consolidación del subsuelo es una condición sine qua non antes de proceder a la colocación de las capas superficiales del firme.
Impacto de las condiciones meteorológicas
Además de las dificultades técnicas, las condiciones climatológicas desfavorables han jugado un papel determinante en el enlentecimiento de las operaciones. Las precipitaciones registradas en las últimas semanas han impedido alcanzar los estándares de compactación del suelo exigidos por el protocolo de control de calidad, paralizando en varias ocasiones la continuidad de los trabajos.
Esta situación ha generado una doble problemática: por un lado, la impossibilitad de cumplir con los plazos establecidos; por otro, la prolongación de las molestias para los vecinos y el comercio local. No obstante, desde el área técnica municipal se insiste en que no se puede comprometer la calidad de la ejecución por apresurar una finalización que pondría en riesgo la durabilidad de la infraestructura.
Datos de la actuación
Los trabajos, que arrancaron el pasado 2 de septiembre, tenían inicialmente una duración prevista de tres meses y un presupuesto de ejecución aproximado de 141.000 euros, dentro de un expediente de licitación que alcanzaba los 160.000 euros. La empresa adjudicataria, Sercam, ha asumido la gestión de estas imprevistas complicaciones con el compromiso de finalizar las fases pendientes con la máxima celeridad una vez se normalicen las condiciones.
Antonio Morales, portavoz de la compañía constructora, ha expresado la frustración compartida por los retrasos, asegurando que los tramos restantes pueden completarse en un tiempo relativamente breve cuando las circunstancias lo permitan. La prioridad, ha subrayado, es resolver correctamente los problemas estructurales para evitar futuros contratiempos.
Objetivo: una solución definitiva
El mensaje reiterado por todas las partes implicadas ha sido el compromiso de garantizar una reurbanización integral y duradera. La inversión realizada persigue no solo embellecer la vía, sino prevenir futuras inundaciones y optimizar los servicios municipales de manera definitiva. Esta perspectiva de largo plazo, argumentan, justifica las molestias temporales que actualmente padecen los residentes.
La alcaldesa ha reconocido personalmente las dificultades que supone convivir con una obra de esta envergadura, especialmente para el tejido comercial de la zona. El Ayuntamiento mantiene abiertos canales de comunicación con los afectados y ha anunciado que se intensificarán las labores en cuanto las condiciones técnicas y climatológicas lo permitan.
La intervención en la calle Catedrático Alcalá Santaella forma parte de un plan más amplio de mejora de infraestructuras urbanas que el gobierno local está desarrollando en diferentes puntos del municipio. La experiencia adquirida en esta actuación, particularmente en la detección de redes obsoletas, servirá para afinar las inspecciones previas en futuros proyectos similares.
Los técnicos municipales han establecido un protocolo de seguimiento semanal para informar a la ciudadanía del avance real de los trabajos, con el fin de mantener una transparencia total sobre la evolución de la obra y los plazos estimados de finalización. Esta medida busca generar confianza y minimizar la incertidumbre entre la población afectada.
Mientras tanto, los vecinos de la calle y sus alrededores continúan adaptando su rutina diaria a las limitaciones derivadas de la obra. Algunos comerciantes han manifestado su preocupación por el impacto económico de la prolongación de los trabajos, aunque la mayoría muestra comprensión ante la necesidad de resolver los problemas estructurales de raíz.
La situación sirve como ejemplo de las complejidades inherentes a las obras de renovación urbana en núcleos históricos, donde las infraestructuras subterráneas han sufrido décadas de modificaciones parciales sin una planificación integral. La falta de documentación técnica actualizada de estas redes es una dificultad común que los ayuntamientos deben afrontar en este tipo de intervenciones.
Desde el área de Urbanismo se ha confirmado que, una vez finalizada la obra, se procederá a la reposición integral del mobiliario urbano y la señalética de la vía, completando así la transformación de una de las arterias principales del casco urbano. El proyecto incluye también la mejora de la accesibilidad en los pasos de peatones y la creación de nuevas zonas de aparcamiento regulado.
La alcaldesa ha concluido su intervención reafirmando el compromiso del equipo de gobierno con la calidad y la seguridad de las inversiones municipales, aunque ello suponga ajustar los plazos iniciales. La satisfacción de los vecinos una vez concluida la obra, ha asegurado, compensará con creces las molestias actuales.