La segunda edición de Supervivientes All Stars ha llegado a su fin con un desenlace épico: Rubén Torres, el bombero barcelonés, se ha alzado como el gran ganador tras 56 días de supervivencia extrema en las playas de Honduras. La final, presentada por Jorge Javier Vázquez y Laura Madrueño desde la palapa, fue un duelo de titanes contra Jessica Bueno, con un resultado ajustado hasta el último segundo: 51,4% frente a 48,6%.
La noche comenzó con la despedida de Tony Spina, cuarto clasificado, y Miri Pérez-Cabrero, tercera finalista, quienes agradecieron la experiencia y se mostraron emocionadas por haber llegado tan lejos. Pero el foco se centró en el enfrentamiento final entre Rubén y Jessica, dos concursantes con gran conexión con el público. El televoto fue una montaña rusa de emociones, con empates, sorpresas y giros inesperados que mantuvieron en vilo a los espectadores hasta el anuncio del ganador.
Rubén, que el año pasado quedó a las puertas de la victoria, logró su revancha. Visiblemente emocionado, dedicó su triunfo a su familia y a Laura Madrueño, quien lo acompañó durante toda la aventura. En un gesto emotivo, entregó el cheque de 50.000 euros a su novia, quien lo esperaba entre lágrimas en la palapa. "No me lo creo... esto va por ellos", dijo el ganador, abrazando a su pareja.
Jessica Bueno, por su parte, se mostró orgullosa de su paso por el concurso. "Me he dejado la piel. He vivido esta aventura al máximo y me siento muy agradecida", afirmó, reconociendo que se sentía ganadora por haber llegado tan lejos.
La gala fue un éxito de audiencia, alcanzando un 20,8% de share y más de 1,2 millones de espectadores, liderando su franja horaria y conquistando a los jóvenes de 13-24 y 25-44 años. Este triunfo no solo corona a Rubén como el campeón de la edición, sino que también refuerza el éxito de Supervivientes All Stars como uno de los realities más seguidos de la temporada.
Más allá del escenario, la edición ha sido recordada por su dureza extrema: tormentas, huracanes y condiciones climáticas adversas pusieron a prueba tanto a los concursantes como al equipo técnico, que trabajó sin descanso para garantizar la emisión. Un esfuerzo que, según Juan Ramón Gonzalo, director de Cuarzo TV, ha sido "el más duro jamás vivido".
Rubén Torres no solo se lleva el premio económico, sino también el cariño del público y el reconocimiento de sus compañeros. Una victoria merecida, tras una aventura que ha dejado huella en todos los que la vivieron.