Cowboys vs Commanders: victoria navideña de Dallas en vano para playoffs NFL 2025

Dallas supera a Washington en un duelo de Semana 17, pero los resultados de otros equipos le niegan el pase a la postemporada

El Dallas Cowboys cerró su temporada 2025 con sabor agridulce al imponerse al Washington Commanders en un emocionante duelo de la Semana 17, celebrado en el Northwest Stadium durante la jornada navideña. Aunque la victoria decoró la festividad para la franquicia de Texas, los resultados concurrentes en otros estadios de la Conferencia Nacional terminaron por frustrar las aspiraciones de los Cowboys de clasificarse a los playoffs.

El encuentro, que se desarrolló bajo la expectativa de una eliminatoria directa, presentó un guion de idas y venidas donde ambas defensas mostraron sus limitaciones ante ofensivas necesitadas de protagonismo. Desde el inicio, el mariscal de campo de Dallas, Dak Prescott, asumió el liderazgo de una serie ofensiva que buscaba imponer ritmo desde la línea de scrimmage.

La primera mitad estuvo marcada por una batalla de posición en el campo rival. Prescott combinó sus habilidades aéreas con la potencia terrestre de Malik Davis y Hunter Luepke, quienes se convirtieron en los pilares del ataque terrestre de los Cowboys. Una jugada memorable llegó cuando el quarterback escapó del pocket para correr tres yardas por el centro, siendo detenido justo antes de la línea de las 30 yardas de Washington por la defensa de Jalyn Holmes.

La estrategia de ambos equipos se centró en aprovechar cada posesión. Los Commanders, por su parte, respondieron con su propio mariscal de campo, Josh Johnson, quien demostró precisión en sus pases cortos y medianos. Conectó con Jeremy McNichols y Ben Sinnott para avances de 7 y 10 yardas respectivamente, manteniendo vivas las esperanzas de la ofensiva de Washington. La conexión con el receptor estrella Terry McLaurin por 12 yardas evidenció la capacidad de los locales para generar espacios en la secundaria visitante.

El factor sorpresa del encuentro llegó a través de las botas de los pateadores. Jake Moody, especialista de los Cowboys, anotó un gol de campo de 51 yardas que resonó como un golpe anímico para el equipo visitante. No obstante, la respuesta no se hizo esperar. Brandon Aubrey, su homólogo en Washington, replicó con idéntica distancia, clavando otro gol de campo de 51 yardas que igualó las acciones y mantuvo la tensión del compromiso.

La segunda mitad evidenció un duelo de estrategias entre los cuerpos técnicos. Los tiempos muertos se convirtieron en herramientas fundamentales para reorganizar las líneas y estudiar las tendencias del rival. Los Cowboys utilizaron sus tiempos de espera para detener el reloj en momentos críticos, mientras que los Commanders respondían con la misma moneda cuando la ofensiva de Dallas amenazaba en territorio enemigo.

Una secuencia determinante se produjo cuando Prescott lanzó un pase de 21 yardas al centro, encontrando a George Pickens en una ruta precisa que colocó a los Cowboys en posición de anotar. La defensa de Washington, liderada por Javon Kinlaw y Jer'Zhan Newton, cometió penalizaciones costosas que extendieron las series de Dallas y facilitaron el avance hacia la zona de anotación.

La línea ofensiva de los Cowboys mostró solidez en los momentos decisivos, permitiendo que Malik Davis acumulara yardas por el centro y la derecha con carreras de 4, 5 y 7 yardas que consumían el reloj y desgastaban a la defensa local. La advertencia de dos minutos llegó con el partido en vilo, y Dallas mantuvo la calma para gestionar la ventaja.

El desenlace final reflejó la superioridad de los visitantes en la gestión del juego. A pesar de los intentos de Washington por remontar mediante una ofensiva aérea dirigida por Johnson, la defensa de Dallas, con jugadas clave de Kenneth Murray Jr. y Reddy Steward, selló el triunfo. La interceptación de Prescott por parte de Ricky Barber no fue suficiente para que los Commanders capitalizar la posesión, ya que el reloj se convirtió en su peor enemigo.

El resultado final, aunque favorable para los Cowboys, resultó insuficiente para sus aspiraciones de postemporada. La combinación de esta victoria con derrotas previas en la temporada y los triunfos de otros competidores directos en la Conferencia Nacional dejó a Dallas fuera de los playoffs por diferencia de desempate. La victoria navideña, por tanto, se convirtió en un consuelo amargo para una franquicia que había apostado todo a esta última jornada.

Para Washington, la derrota en casa representa un cierre decepcionante de una temporada irregular. Aunque mostraron destellos de calidad con jugadores como Terry McLaurin y Ben Sinnott, la inconsistencia defensiva y los errores en momentos críticos condenaron sus opciones. El futuro del equipo pasa por reevaluar su estrategia defensiva y fortalecer una línea ofensiva que mostró vulnerabilidad ante la presión visitante.

El duelo de pateadores, con dos goles de campo de más de 50 yardas, será recordado como el aspecto más destacado de un partido donde los pequeños detalles marcaron la diferencia. La precisión de Moody y Aubrey bajo presión demostró la importancia de los especialistas en juegos de alta intensidad.

En definitiva, el triunfo de los Dallas Cowboys sobre los Washington Commanders en Navidad quedará en la memoria como una victoria pírrica. La NFL 2025 les regaló una victoria, pero les negó el regalo más preciado: un lugar en la postemporada. La lección es clara: en la liga, cada partido cuenta, y una victoria en la última jornada no siempre es suficiente para borrar los errores de semanas anteriores.

Referencias

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