El Cabildo de Tenerife ha puesto en marcha este viernes el Plan de Emergencias Insular de Tenerife (PEIN) en su nivel más alto, la situación de Alerta Máxima, como medida preventiva ante la proximidad de la borrasca Emilia. Se trata de una borrasca fría aislada de alto impacto que ya ha comenzado a afectar a la isla y que alcanzará su mayor intensidad durante la jornada del sábado, según las predicciones meteorológicas.
Las proyecciones más recientes indican que Emilia dejará nieve en las cumbres de la isla, con acumulaciones que podrían llegar a los 5 centímetros de espesor, especialmente durante el sábado. Además, se esperan precipitaciones muy intensas que podrían acumular hasta 100 milímetros en apenas 12 horas, lo que representa un riesgo significativo de inundaciones y desbordamientos.
El fenómeno meteorológico también traerá consigo rachas de viento superiores a los 90 km/h, que se harán más intensas a partir de la tarde del viernes. Sin embargo, el aspecto más preocupante radica en el temporal marítimo que afectará especialmente al litoral norte de la isla, donde las olas podrían superar los 6 metros de altura, generando situaciones de peligro en las zonas costeras.
Ante este escenario, la institución insular ha tomado la decisión de prohibir el acceso y la circulación a partir de las 15 horas de este viernes por todas las pistas, senderos, caminos y zonas de campo a través ubicados dentro de los Espacios Naturales Protegidos. Esta medida responde al elevado riesgo de desprendimientos, caída de árboles e inundaciones que podrían poner en peligro a las personas que transiten por estas zonas.
La prohibición alcanza también a los campamentos, zonas de acampada y áreas recreativas, así como a las carreteras de acceso al Teide y al macizo de Teno, dos de los enclaves naturales más visitados de la isla. La medida busca garantizar la seguridad de residentes y visitantes ante las condiciones extremas que se prevén.
Rosa Dávila, presidenta del Cabildo de Tenerife, ha hecho un llamamiento a la población a través de los medios de comunicación: «Queremos pedirles la máxima prudencia, evitando los desplazamientos innecesarios, respetando los cierres, y estando atentos únicamente de las fuentes oficiales. Los equipos de emergencia están movilizados, y en coordinación para cualquier incidencia, pero la mejor protección es la de cuidarnos entre todos».
En una nota de prensa difundida durante la mañana del viernes, Dávila ya había advertido sobre la gravedad del fenómeno: «La borrasca Emilia presenta características de alto impacto y actuamos con antelación para minimizar riesgos. Pedimos a la ciudadanía responsabilidad, evitar desplazamientos innecesarios y mantenerse informada a través de los canales oficiales».
Por su parte, Blanca Pérez, consejera de Medio Natural del Cabildo, ha enfatizado la necesidad de cumplir estrictamente con las restricciones: «Las medidas adoptadas, como el cierre de los Espacios Naturales Protegidos y la activación en Alerta Máxima del PEIN, responden a un riesgo 'real' de desprendimientos, inundaciones, caída de árboles y fuerte oleaje. Pedimos a la población que respete escrupulosamente las restricciones y siga las recomendaciones de autoprotección».
La Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias mantiene activa la Alerta por Fenómenos Costeros, que podría elevarse a Alerta Máxima el sábado, así como la Alerta por Vientos. Por su parte, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido avisos de nivel amarillo y naranja que afectan a la isla por diversos fenómenos: lluvias intensas, vientos fuertes, fenómenos costeros, nieve y tormentas.
El protocolo de actuación del Cabildo contempla la revisión constante de las condiciones meteorológicas y la coordinación con todos los cuerpos de seguridad y emergencias para garantizar una respuesta rápida ante cualquier incidente que se pueda producir. La población puede consultar el estado de las alertas y las recomendaciones a través de los canales oficiales del Cabildo y del Gobierno de Canarias.
Las autoridades insulares recuerdan que durante situaciones de alerta meteorológica es fundamental no acercarse a zonas de acantilados, playas o paseos marítimos, ya que el oleaje puede ser impredecible y extremadamente peligroso. Asimismo, se recomienda evitar la circulación por carreteras secundarias y zonas de montaña, donde el riesgo de desprendimientos es mayor durante episodios de lluvia intensa.
La experiencia de eventos meteorológicos previos ha demostrado que la precaución y la prevención son las mejores herramientas para evitar incidentes y garantizar la seguridad de todas las personas. Por este motivo, desde el Cabildo se insiste en la necesidad de seguir exclusivamente la información oficial y no hacer caso a rumores o fuentes no verificadas.
Los servicios de emergencia permanecerán en estado de alerta durante toda la duración del fenómeno, con equipos desplegados en las zonas de mayor riesgo y listos para actuar de inmediato si fuera necesario. La colaboración ciudadana y el cumplimiento de las medidas de seguridad son elementos esenciales para superar esta situación sin incidentes graves.
La isla de Tenerife, con su orografía compleja y su exposición a fenómenos meteorológicos atlánticos, cuenta con protocolos bien establecidos para hacer frente a situaciones como la que plantea Emilia. La coordinación entre administraciones y la respuesta de la ciudadanía serán determinantes para minimizar los efectos de esta borrasca de alto impacto.
Finalmente, desde el Cabildo se recuerda que una vez pasado el episodio, se evaluará el estado de los espacios naturales y las infraestructuras antes de levantar las restricciones de acceso. La seguridad es la prioridad absoluta y no se correrán riesgos innecesarios en ningún momento del proceso.