La selección brasileña ha dado un paso significativo en su proceso de renovación con la convocatoria de Vitor Roque, delantero del Palmeiras, por primera vez bajo el mando de Carlo Ancelotti. El técnico italiano, que asumió el banquillo de la Canarinha este año, ha decidido confiar en el joven atacante de 20 años, quien ha demostrado un rendimiento excepcional en el campeonato brasileño.
Roque, que llegó al Palmeiras en febrero tras su paso por el FC Barcelona, ha marcado 17 goles en 50 partidos con el equipo paulista, incluyendo 13 en la liga. Su aporte ha sido clave para que el Palmeiras se mantenga como líder del Brasileirão y alcance la final de la Copa Libertadores. Ancelotti no dudó en destacar su buen momento: "Lo está haciendo muy bien en el campeonato brasileño", afirmó en rueda de prensa.
Esta no es la primera vez que Roque es llamado a la selección absoluta. Ya fue convocado en marzo de 2023 para un amistoso contra Marruecos, aunque no logró debutar. Ahora, con más experiencia y confianza, tiene una nueva oportunidad para demostrar su valía en el escenario internacional.
La convocatoria de Roque forma parte de una estrategia más amplia de Ancelotti, quien ha mostrado un interés creciente en los talentos emergentes del fútbol brasileño. "Estamos muy concentrados en lo que pasa en la liga local", señaló el entrenador, destacando que seis de los jugadores convocados actualmente compiten en el Brasileirão.
Además de Roque, la lista incluye a figuras consolidadas como Vinicius Jr. y Rodrygo Goes, ambos del Real Madrid, así como a Estêvão, joven promesa del Chelsea. En el mediocampo, Ancelotti contará con la experiencia de Casemiro, del Manchester United, y la creatividad de Lucas Paquetá, del West Ham. En defensa, Éder Militão, también del Real Madrid, será una pieza clave.
Una ausencia notable en esta convocatoria es la de Neymar, quien sigue en proceso de recuperación tras una lesión y actualmente juega con el Santos. Ancelotti reconoció que no ha hablado recientemente con el astro brasileño, pero expresó su interés en conocer cuándo podrá volver a competir: "Estoy a la espera de saber cuándo va a poder jugar de nuevo".
Brasil se prepara para dos amistosos clave en noviembre: el 15 de noviembre frente a Senegal en Londres, y el 18 de noviembre contra Túnez en Lille, Francia. Estos partidos serán los últimos de la selección en 2024 y servirán como prueba de fuego para evaluar el rendimiento del equipo antes de enfocarse en la clasificación para el Mundial de 2026.
Sobre el próximo Mundial, Ancelotti fue cauteloso pero optimista. "Estoy muy cerca de la que podría ser la lista definitiva", afirmó, aunque añadió que "aún queda mucho tiempo" y que las lesiones y el rendimiento de los jugadores serán factores determinantes. La selección brasileña busca reconstruirse tras un ciclo de transición y volver a ser una potencia indiscutible en el fútbol mundial.
La convocatoria de Roque representa un mensaje claro: Ancelotti está dispuesto a apostar por el talento joven, siempre que demuestre consistencia y rendimiento. El delantero del Palmeiras tiene ahora la oportunidad de convertirse en una pieza fundamental en el futuro de la selección, especialmente si logra adaptarse rápidamente al nivel internacional.
Con una mezcla de experiencia y juventud, Brasil busca recuperar su brillo en el escenario global. La presencia de Roque, junto a figuras como Vinicius y Rodrygo, sugiere que el equipo está en un proceso de renovación saludable. Ancelotti, conocido por su capacidad para manejar grandes estrellas y desarrollar talentos, parece tener un plan claro para los próximos años.
Los aficionados brasileños esperan con ansias ver a Roque en acción con la camiseta de la Canarinha. Su estilo de juego, combinado con su instinto goleador, podría ser la chispa que necesite la selección para volver a brillar en los grandes escenarios. Los amistosos contra Senegal y Túnez serán la primera prueba real de este nuevo proyecto, y todos los ojos estarán puestos en el joven delantero que promete mucho más de lo que ya ha mostrado.