Edurne, una de las voces más consolidadas del panorama musical español de las últimas dos décadas, regresa a la actualidad con un proyecto que fusiona su pasión por la música y su amor por las fiestas navideñas. La artista madrileña, que saltó a la fama en 2005 a través de la quinta edición de Operación Triunfo, ha presentado recientemente su nuevo álbum titulado "Navidad junto a ti", una colección que mezcla temas clásicos de la época con composiciones originales que reflejan su evolución artística y madurez vocal.
La trayectoria profesional de la cantante ha sido meteórica desde sus inicios. A pesar de quedar en sexta posición en la academia de talentos de TVE, donde solo fue nominada en una ocasión, Edurne demostró tener un carácter resistente y una vocación inquebrantable que la diferenciaba de sus compañeros. Su primer disco homónimo, lanzado en 2007, superó las 40.000 copias vendidas en apenas siete días, consolidando su salto a la industria y demostrando que el respaldo del público no siempre está ligado al puesto final en un concurso. Con el paso de los años, su carrera ha alcanzado hitos internacionales, como su representación en el Festival de Eurovisión en 2015, donde defendió el tema "Amanecer" en Viena, obteniendo una destacada posición y demostrando su capacidad para conectar con audiencias de todo el continente.
El pasado miércoles, Edurne visitó el plató de El Hormiguero, el exitoso programa de Antena 3 presentado por Pablo Motos, para promocionar su nuevo trabajo discográfico. Durante la entrevista, la conversación derivó hacia sus tradiciones familiares y su relación con las fiestas, especialmente significativas desde que es madre de Yanay, su hija fruto de la relación con el futbolista David de Gea, actual guardameta de la Fiorentina italiana y exjugador estrella del Manchester United durante más de una década.
"Me encanta la Navidad, me encanta disfrutarla en familia. En mi casa escuchamos villancicos durante todo el año, a mi hija y a mí nos encantan, no se me hace pesado en absoluto. Tiene maneras, no sé qué hará el día de mañana, pero tiene buen oído, entona y le encanta bailar. Que sea lo que ella quiera de mayor, pero sí se dedicara a la música, que es mi medio, fenomenal, me encantaría y le podría ir ayudando. La música es preciosa y a mí me hace feliz", destacó la artista sobre las cualidades de su pequeña, dejando entrever que el talento podría ser hereditario y que la música ya ocupa un lugar central en su hogar.
En cuanto a sus preferencias gastronómicas navideñas, Edurne no dudó en mostrarse selectiva y alejada de las tradiciones más arraigadas en España. "No me gusta el turrón ni el mazapán ni el roscón de Reyes. El 'panettone' sí me gusta y ya que paso las Navidades en Italia aprovecharé", confesó, mostrando su predilección por la tradición italiana, donde reside su familia durante las fiestas. Esta declaración refleja la influencia que ha tenido en su vida personal la residencia de su pareja en el país transalpino y cómo ha adoptado costumbres de su entorno.
Sin embargo, el momento más anecdótico y que ha generado mayor repercusión en la entrevista llegó cuando la cantante reveló las complicadas condiciones en las que se gestó el álbum. La grabación tuvo lugar en pleno mes de agosto, en medio de una ola de calor que puso a prueba la resistencia de todo el equipo técnico y artístico. "Lo grabé en pleno agosto, sudando la gota gorda en el estudio. No me gusta además poner el aire acondicionado en el estudio de grabación, así que mi productor y yo pasamos muchísimo calor grabando el disco", relató, destacando su exigencia profesional y su preferencia por condiciones naturales incluso en pleno verano, una decisión que puede resultar controvertida pero que demuestra su compromiso con la autenticidad.
La situación se volvió aún más surrealista durante el rodaje del videoclip de "Blanca Navidad", uno de los temas emblemáticos del disco. Para crear el ambiente invernal, el equipo decidió utilizar copos de nieve artificiales que, lejos de resultar inocuos, se convirtieron en un auténtico peligro para la salud de la intérprete. "Los copos los pusieron en el videoclip, que queda muy bonito, pero al coger aire al cantar me tragué como cuatro copitos y uno de ellos no podía expulsarlo, pensaba que me ahogaba", desveló entre risas y todavía con cierto sobrecogimiento al recordar el incidente de los copos de nieve que casi interrumpe la producción.
Este percance, que podría haber tenido consecuencias más graves de no mediar la rápida actuación del equipo, sirvió para demostrar el compromiso de Edurne con su trabajo, capaz de mantener la calma y continuar con la grabación pese al susto. La anécdota rápidamente se ha convertido en uno de los momentos más comentados de su aparición televisiva, generando reacciones en redes sociales y mostrando el lado más humano de la artista, que no duda en compartir sus experiencias más vulnerables con el público.
Además de su faceta como cantante, Edurne ha consolidado su presencia en la pequeña pantalla como coach de La Voz Kids, donde su experiencia personal le confiere una ventaja única y una conexión especial con los concursantes. "Puedo tener más empatía porque eso que están viviendo ellos yo ya lo viví. Estoy encantada, además rodeada de niños, yo que soy tan niñera lo disfruto mucho. Hay niños alucinantes, que no te puedes creer el talento que tienen. Además, hay mucho pique entre los jueces. Diría que el más competitivo es Antonio Orozco", aseguró sobre su experiencia en el talent show, donde los entrenadores compiten por hacerse con las mejores voces infantiles del país y donde las dinámicas entre coaches generan momentos de gran tensión y entretenimiento.
La artista, conocida por su cercanía y naturalidad, ha sabido mantenerse relevante en una industria en constante evolución, alternando con éxito la música, la televisión y su vida familiar. Su capacidad para conectar con diferentes públicos, desde los seguidores de su música pop hasta los espectadores de programas familiares, demuestra una versatilidad poco común en el panorama actual y una inteligencia artística que le permite adaptarse a diferentes formatos sin perder su esencia.
Con "Navidad junto a ti", Edurne demuestra que su pasión por la música trasciende las épocas del año y las dificultades técnicas, ofreciendo un trabajo que combina tradición y modernidad, al igual que su propia trayectoria profesional. El disco, grabado en condiciones extremas y presentado con humor y autenticidad, se convierte en un reflejo fiel de la artista: una mujer que no teme a los desafíos y que encuentra la creatividad incluso en los momentos más inesperados, capaz de transformar un susto en una historia que conecta con su audiencia.
La cantante continúa así consolidando su legado en el panorama cultural español, demostrando que el talento, cuando se acompaña de constancia y autenticidad, encuentra siempre su espacio. Su historia, desde los inicios en Operación Triunfo hasta convertirse en una referente musical y televisiva, sirve de inspiración para nuevas generaciones de artistas que buscan hacerse un hueco en la industria del entretenimiento, mostrando que el éxito no siempre sigue un camino lineal y que la perseverancia es clave para construir una carrera sostenible en el tiempo.