La Copa del Rey vuelve a ser protagonista con un sorteo que ha emparejado a gigantes del fútbol español con humildes representantes de categorías inferiores. Los dieciseisavos de final han dejado un cartel repleto de duelos atractivos, donde la magia del torneo del KO se hace patente con encuentros que ponen a prueba la fortaleza de los grandes frente a la ilusión de los modestos. Esta fase de la competición siempre ha sido especial por su capacidad para generar sorpresas y escribir páginas memorables en la historia del fútbol nacional.
Los cruces más llamativos enfrentan a Ourense contra el Athletic Club, Atlético Baleares frente al Atlético de Madrid, Talavera contra el Real Madrid y Guadalajara versus el FC Barcelona. Estos cuatro compromisos concentran la esencia de una competición donde la igualdad y la sorpresa son posibles en cada edición. La tradición del torneo demuestra que en estas eliminatorias a partido único, la diferencia de categoría no siempre es determinante.
Los estadios de los conjuntos de menor categoría acogerán estos vibrantes encuentros los días 16, 17 y 18 de diciembre, salvo excepción. El único desplazamiento en el calendario afecta al duelo entre Granada y Rayo Vallecano, aplazado al 6 de enero por los compromisos europeos del conjunto madrileño en la Conference League. Esta decisión busca garantizar el descanso necesario para el Rayo, que compite en el panorama internacional.
En lo que respecta a los equipos de Segunda Federación, el Ourense y el Atlético Baleares tendrán la oportunidad de medirse a dos campeones de la Copa del Rey. El conjunto gallego, actual poseedor del título de la Copa Federación y verdugo de equipos como Oviedo y Girona en rondas precedentes, recibirá en O Couto a un Athletic Club que ocupa el segundo lugar en el palmarés histórico del torneo, solo por detrás del Barcelona. La fortaleza del Ourense en su feudo y su condición de 'matagigantes' hacen de este duelo un atractivo especial para los amantes del fútbol. Por su parte, el Atlético Baleares, que ya dejó en el camino al Espanyol, se medirá al vigente campeón de la Liga, el Atlético de Madrid, en un estadio que espera registrar una gran entrada y una atmósfera festiva.
La Primera Federación también tiene sus representantes en los partidos más atractivos. El CF Talavera y el CD Guadalajara, ambos del Grupo 1, se han llevado el premio gordo del sorteo al cruzarse con Real Madrid y Barcelona, respectivamente. A pesar de sus complicadas posiciones en la tabla -Guadalajara está en la decimoséptima plaza con 17 puntos, justo en la zona de salvación, y Talavera es colista con 12-, ambos equipos encontraron en la Copa un respiro a su irregular trayectoria liguera. El Talavera, además, ya demostró su capacidad para dar la campanada al eliminar al histórico Málaga de Segunda División por 2-1 en El Prado, un resultado que les da moral para afrontar el reto madridista.
El formato de partido único en campo de los equipos de categoría inferior aumenta las posibilidades de sorpresa. Esta tradición del torneo permite a los conjuntos modestos disfrutar de la ventaja de jugar en sus propios estadios, con su afición cerca, creando un ambiente propicio para los golpes de efecto. La presión recae sobre los favoritos, que deben adaptarse a campos más pequeños y condiciones diferentes a las que están acostumbrados en sus estadios modernos.
Además de estos cruces estelares, el sorteo ha deparado once enfrentamientos entre equipos de Segunda y Primera División, donde los clubes de la categoría de plata tendrán la oportunidad de medir su progreso contra la élite del fútbol español. Estos duelos suelen ser equilibrados y a menudo deparan sorpresas que quedan para la memoria de los aficionados. La motivación extra de medirse a un equipo de Primera suele elevar el nivel de los conjuntos de Segunda, haciendo estos partidos especialmente impredecibles.
El único duelo exclusivo entre equipos de Primera División enfrentará al Deportivo Alavés contra el Sevilla FC en Mendizorrotza. Los vitorianos recibirán a un conjunto andaluz que ya se impuso por 1-2 en la quinta jornada de LaLiga, por lo que el Alavés buscará la revancha en un escenario diferente y con un título en juego. Este tipo de enfrentamientos directos entre equipos de la máxima categoría adquiere un cariz especial en el formato de Copa, donde la eliminatoria se decide en noventa minutos.
El resto del cuadro completa un panorama variado con encuentros como Murcia-Betis, Eldense-Real Sociedad, Burgos-Getafe, Cultural Leonesa-Levante, Eibar-Elche, Deportivo-Mallorca, Racing-Villarreal, Albacete-Celta de Vigo, Huesca-Osasuna y Sporting-Valencia. Cada uno de estos cruces tiene su propia historia y atractivo, con equipos de diferentes realidades pero con el mismo objetivo: avanzar a la siguiente ronda. La diversidad de estos enfrentamientos refleja la riqueza del fútbol español en todas sus categorías.
La Copa del Rey mantiene vivo su espíritu de competición abierta donde cualquier equipo puede soñar con la gloria. Los conjuntos modestos ven en esta competición una oportunidad única para dar a conocer su proyecto, captar la atención de los medios y, por qué no, generar ingresos económicos que les ayuden a sostener sus estructuras. Para los grandes, representa el primer título de la temporada y una vía directa a la Europa League si alcanzan la final. Esta doble motivación hace que todos los equipos afronten la competición con máxima seriedad.
La expectativa está servida para una ronda donde la pasión por el fútbol se mezcla con la ilusión de los más pequeños. Los estadios de O Couto, Estadio Balear, El Prado y Pedro Escartín se preparan para vivir noches mágicas que, sin duda, quedarán en la memoria de sus aficionados. La Copa del Rey vuelve a demostrar por qué es una de las competiciones más especiales del panorama futbolístico mundial, donde la igualdad de oportunidades y la emoción del golpe sorpresa mantienen viva la esencia del deporte rey.