Telecinco apuesta por 'La isla' para salvar 'GH 20'

La cadena reorganiza su late night con un resumen especial de Gran Hermano tras el éxito de 'La isla de las tentaciones', en un intento de recuperar audiencia.

Telecinco no se rinde y está dispuesta a mover todas sus fichas para intentar reflotar Gran Hermano 20, cuya audiencia ha caído a mínimos históricos desde su estreno. Con cifras que rozan el 10% en sus emisiones más importantes, la cadena ha decidido implementar una estrategia arriesgada pero necesaria: aprovechar el tirón de La isla de las tentaciones 9, su otro gran reality, para arrastrar espectadores hacia el formato de Zeppelin TV.

Este lunes, 17 de noviembre, tras el séptimo capítulo de La isla de las tentaciones —que se emite entre las 21:45 y las 00:30 horas—, Telecinco ofrecerá un bloque especial de Gran Hermano 20 entre las 00:20 y las 02:00 horas. El espacio estará conducido por Ion Aramendi, quien presentará un resumen de los momentos más destacados de la semana, seguido de una conexión en directo con la casa de Tres Cantos. La idea es clara: captar a los espectadores que acaban de ver el reality de parejas y retenerlos en la cadena, en un intento por revertir la tendencia negativa que arrastra el programa de supervivencia.

La vigésima edición de Gran Hermano comenzó con un estreno decepcionante: apenas un 15,8% de cuota y 889.000 espectadores, el peor arranque en la historia del formato en España. Las semanas siguientes no han mejorado: la segunda gala cayó al 11,8%, y la edición exprés en access prime time no superó el 6,2%. Incluso el primer debate dominical, con Aramendi al frente, apenas logró un 9,4% y 740.000 espectadores —números insuficientes para un programa que, en sus mejores épocas, lideraba cómodamente su franja horaria.

La cadena ya probó un cambio de estrategia el domingo anterior, trasladando el debate de Gran Hermano a las 23:00 horas, justo después de una versión condensada de El debate de las tentaciones con Sandra Barneda. Sin embargo, los resultados no fueron los esperados: el programa de los tentadores logró un 9% de share, y el debate de Aramendi apenas alcanzó el 10,7%. Estos datos han obligado a Telecinco a redoblar esfuerzos y apostar por una solución más inmediata y directa.

La nueva emisión especial de Gran Hermano 20 ocupará el hueco que inicialmente estaba destinado al debate de Barneda, y que hasta ahora se reservaba para contenidos propios del programa. Esta decisión refleja la urgencia con la que Mediaset está actuando: no solo busca mejorar las cifras de audiencia a corto plazo, sino también evitar que el descalabro del formato termine en una cancelación anticipada o en más recortes de programación.

La estrategia tiene un doble objetivo. Por un lado, intentar capitalizar el éxito de La isla de las tentaciones, cuya media de inicio de temporada en la noche del lunes supera el 15% de share. Por otro, reforzar la presencia de Gran Hermano en la parrilla, especialmente en el late night, donde la competencia es menor y los espectadores más fieles. Aunque el intento de trasvase de audiencia entre ambos realities no ha dado resultados hasta ahora, Telecinco insiste en probar nuevas fórmulas.

El equipo de producción de Gran Hermano 20 también está trabajando en ajustes internos para revitalizar el formato. Se barajan cambios en la dinámica de las nominaciones, la introducción de nuevos concursantes y la posibilidad de acortar la duración del programa si las cifras no mejoran. La presión es máxima: si la audiencia no reacciona en las próximas semanas, la cadena podría verse obligada a tomar decisiones drásticas.

En el contexto actual, donde los formatos de reality show compiten por la atención del espectador en un entorno saturado de contenido, Telecinco necesita demostrar que aún puede generar impacto con sus producciones emblemáticas. La apuesta por Ion Aramendi como conductor del resumen especial es un gesto de confianza en su capacidad para conectar con el público, y también un intento de recuperar la esencia del programa: el entretenimiento directo, sin filtros y con emoción en tiempo real.

La pregunta que queda en el aire es si esta nueva estrategia será suficiente para revertir la tendencia. Los espectadores, cada vez más exigentes y con múltiples opciones de entretenimiento, no se conforman con formatos que no ofrecen novedades o que se repiten sin evolución. Gran Hermano 20 necesita no solo más audiencia, sino también una identidad renovada que lo distinga de sus anteriores ediciones y de los demás realities del panorama televisivo.

Mientras tanto, la cadena mantiene la esperanza de que el impulso de La isla de las tentaciones pueda servir como trampolín. Si el público decide quedarse en Telecinco tras el final del reality de parejas, quizás Gran Hermano tenga una segunda oportunidad. Pero el tiempo apremia, y cada semana que pasa sin mejoras en las cifras acerca más la posibilidad de un final anticipado.

Referencias