Roberto Herrera se despide de las Campanadas Canarias

Tras más de dos décadas al frente, su ausencia marca el fin de una era en la gala de fin de año de RTVE, que apuesta por nuevos rostros y música como protagonista.

La televisión pública española ha decidido dar un giro significativo a su tradicional retransmisión de las Campanadas desde las Islas Canarias. Roberto Herrera, figura icónica de esta cita festiva durante más de veinte años, no estará presente en la edición de este año. Su salida, aunque no anunciada con grandes titulares, ha generado una ola de reacciones entre los espectadores que lo consideraban un símbolo de continuidad y nostalgia en las noches de fin de año.

La decisión de RTVE responde a una estrategia de renovación que busca conectar con una audiencia más joven y diversa. En lugar de mantener el formato clásico, la cadena ha optado por una gala centrada en la música y el espectáculo, con una dupla de presentadores completamente nueva: Nía y St. Pedro, dos artistas canarios con fuerte proyección en la escena musical actual. Nía, que ya lleva cuatro años consecutivos en el evento, aporta experiencia y carisma, mientras que St. Pedro, con un año de creciente popularidad, representa la apuesta por el talento emergente.

Este cambio no es solo estético, sino también simbólico. Roberto Herrera acumula veintiuna ediciones consecutivas como presentador de las Campanadas Canarias en TVE, lo que lo convierte en el rostro más longevo y reconocible de esta tradición televisiva. Su estilo cercano, su voz calmada y su capacidad para conectar con el público lo han convertido en un referente generacional. Su ausencia no solo deja un hueco en el escenario, sino también en la memoria colectiva de quienes han celebrado el Año Nuevo frente a la televisión.

La elección de Nía y St. Pedro refleja una tendencia más amplia en la programación de fin de año: la búsqueda de frescura, ritmo y nuevas formas de entretenimiento. La música, como eje central de la gala, busca generar una atmósfera festiva y dinámica, alejada del tono más solemne que caracterizaba las ediciones anteriores. Esta apuesta también responde a la competencia creciente entre cadenas, que cada año buscan diferenciarse con formatos más audaces y presentadores con mayor impacto visual y mediático.

En el panorama televisivo español, las Campanadas se han convertido en una batalla de audiencias. Mientras RTVE apuesta por la renovación, otras cadenas mantienen sus parejas estrella. Buenafuente y Abril se enfrentarán a Cristina Pedroche y Alberto Chicote en Antena 3 y La Sexta, mientras que en Telecinco y Cuatro, Sandra Barneda y Xuso Jones repetirán como anfitriones. En TV3, Laura Escanes y Miki Núñez también volverán a liderar la celebración en Cataluña.

La ausencia de Herrera no significa un olvido, sino una transición. Su legado sigue vivo en los recuerdos de millones de espectadores, en las imágenes de años pasados y en la propia historia de la televisión española. Su despedida, aunque silenciosa, es un momento clave que marca el cierre de una etapa y el inicio de otra, más moderna, más musical y más orientada al futuro.

Para muchos, las Campanadas no son solo un evento televisivo, sino una tradición familiar, un ritual compartido que une generaciones. La salida de Herrera puede generar cierta nostalgia, pero también abre la puerta a nuevas experiencias y emociones. La televisión, como cualquier medio, debe evolucionar, y esta edición de las Campanadas Canarias es un claro ejemplo de ese proceso.

En definitiva, el relevo de Roberto Herrera por Nía y St. Pedro no es solo un cambio de presentadores, sino un cambio de era. Una era que apuesta por la música, la juventud y la innovación, sin olvidar el espíritu festivo que siempre ha caracterizado a estas celebraciones. El público tendrá la última palabra, pero una cosa es segura: las Campanadas de este año serán diferentes, y eso, en sí mismo, ya es un motivo para seguirlas con atención.

Referencias