La familia del delantero del Santos ha cerrado una de las operaciones más emblemáticas del deporte reciente. A través de NR Sports, la empresa familiar dirigida por el padre del futbolista, han logrado hacerse con los derechos de imagen de Pelé, el máximo icono del fútbol brasileño. El acuerdo, valorado en 15 millones de euros, permitirá la explotación comercial de la marca de O Rei con el objetivo de revitalizar su legado en el mercado global.
Según informaciones del medio brasileño UOL, el anuncio oficial podría materializarse este miércoles, justo coincidendo con la conmemoración del gol número mil de la leyenda, un hito que marcó la historia del deporte hace décadas. La fecha no es casual, sino una estrategia que refuerza el carácter simbólico de una transacción que une dos generaciones del fútbol carioca.
La negociación con la anterior gestora, Sport10, transcurrió sin fricciones. La firma, que había administrado la marca durante años, había visto cómo la rentabilidad comercial se desplomaba tras el fallecimiento de Pelé en diciembre de 2022. Sin la posibilidad de contar con la presencia física del astro, las campañas perdieron impacto y la marca, aunque icónica, permanecía infrautilizada en el panorama actual. Este contexto facilitó el traspaso a una estructura con mayor capacidad de activación.
El vínculo entre ambas figuras trasciende lo empresarial. Neymar Jr. y Pelé mantuvieron una relación históricamente cercana que se intensificó con el regreso del primero al Santos, el club que vio nacer a ambos talentos con cincuenta años de diferencia. El propio Neymar siempre mostró una reverencia especial hacia el tricampeón del mundo, asumiendo con humildad el apodo de 'El Príncipe' en contraste con el título de 'Rey' que acompañó a Pelé hasta su último día.
Este respeto mutuo se ha traducido en gestos concretos. Recientemente, NR Sports asumió el coste de renovar el palco que Pelé ocupaba en el Vila Belmiro, el estadio del Santos. La intervención, realizada sin apoyo económico del club, incluyó la instalación de nuevos asientos y comodidades modernas para preservar un espacio cargado de memoria histórica. Una inversión que anticipaba el interés familiar por proteger y potenciar el legado del mito.
La operación comercial incluye no solo el uso del nombre y la imagen, sino también la gestión de licencias, productos oficiales y acuerdos de patrocinio asociados a la figura de Pelé. Los planes pasan por desarrollar colecciones exclusivas, experiencias digitales en el metaverso y colaboraciones con marcas globales que quieran asociarse a los valores de excelencia y carisma que representa O Rei.
Este movimiento consolida a la familia Neymar como una de las estructuras económicas más potentes del deporte internacional. Más allá de los suculentos contratos como futbolista y las lucrativas alianzas publicitarias, el clan ha diversificado sus activos en áreas como representación de talentos, gestión de eventos y ahora, administración de leyendas. Un modelo de negocio que transforma la fama deportiva en un imperio empresarial sostenible.
El mercado de derechos post-mortem de figuras deportivas crece exponencialmente. Casos como el de Kobe Bryant, Muhammad Ali o Diego Maradona demuestran que el valor de una leyenda puede multiplicarse tras su partida si se gestiona con estrategia. La familia Neymar parece haber estudiado este modelo, identificando en Pelé una oportunidad de oro: una marca universal subexplotada con potencial ilimitado en mercados emergentes y tradicionales.
La reacción en Brasil ha sido de asombro y expectación. Muchos ven en esta transacción una forma de mantener viva la memoria de su mayor ídolo, mientras que otros cuestionan la mercantilización del legado. Sin embargo, la realidad es que sin una gestión profesional, la marca Pelé corría el riesgo de desvanecerse en el olvido comercial, limitándose a fotografías históricas y menciones protocolarias.
Para el Santos, este acuerdo representa un beneficio indirecto. La revitalización de la imagen de Pelé refuerza el prestigio del club, que siempre se ha enorgullecido de ser la cuna del mejor futbolista de todos los tiempos. La expectativa es que las futuras campañas incluyan al actual capitán y a la leyenda en proyectos conjuntos que potencien la identidad del equipo.
El futuro inmediato incluye el lanzamiento de una línea de productos conmemorativos para el Mundial de Clubes de 2025, donde el Santos espera participar. También se planean experiencias interactivas en museos digitales y colaboraciones con plataformas de streaming para documentales y series que exploren la conexión generacional entre ambos cracks.
La operación deja en evidencia la evolución del futbolista moderno, que ya no se conforma con el éxito en el campo, sino que construye un portafolio empresarial que garantice su influencia más allá de su retiro. Neymar, a sus 32 años, está trazando un camino que le permitirá seguir siendo relevante incluso cuando cuelgue las botas, ahora con el peso de dos leyendas bajo su gestión: la suya propia y la de quien le precedió en el trono del fútbol brasileño.
Con esta adquisición, el legado de Pelé no solo se preserva, se reactualiza. Y la familia Neymar demuestra una vez más que su visión va mucho más allá de las canchas, posicionándose como un actor clave en la industria del deporte global.